Resulta que en Parque Rivadavia, hay un panchero, el cual no solo no cae simpatico por ser un tipo ameno o por brillar por su inteligencia, sino que se agranda como tanga de gorda. Le dicen barco nuevo de mugriento, nunca tocó el agua; debido a su costumbre de agarrar las salchichas con la mano desnuda, que vaya uno a saber que grano se acababa de reventar con ella. Además se cree que es el "number one" (Pobre Anibal!) El "uno" se lo sacó en todas las materias, sobre todo en biología e higiene. Pero el cree que es el más groso del futbol, el más langa con las mujeres; pero lo único donde descolla es en ser "el más pancho". (Aquí apelo al chist fácil) Hipocampo le dicen, se cree un potro y es un pescado.
La historia del puesto de panchos es para otro día, hoy me dedicaré a contar el porqué de su apodo de Bufarreti. Resulta que un día, circulaba el rumor de su prueba para Banfield, a raíz de esto se subió arriba del caballo como San Martín cruzando la cordillera. Vale aclarar que con más de 21 años, está un poco viejo para jugar en primera. Un flaco de uno de los puestos le pide que le alcance una gaseosa, pero este personaje le contesta, haciendose el gran winner, que la busque él porque no tiene ganas o que se yo que más. Para más embarre en esto le dice:
-En el verano (el que acabamos de pasar, esto sucedió por septiembre del 2011) yo voy a estar jugando en primera y a estar rodeado de minas, mientras vos te morís de calor acá en el parque.-
Como la justicia kármica existe, un grupo de notables se mandó a escarmentarlo. Fingiendo una llamada de un hipotético probador de figuras futbolísticas llamado "bufarreti", (!!!!?!?!?!!) le dijeron que lo iban a citar un día a la noche en una cancha, con tentativas a jugar para los "Dogos". Vale aclarar para alguno que no sabe, los "Dogos" es el seleccionado gay, cosa que ya vendría pintando sospechosa para alguien que no es de la comunidad homo. Más si vas recomendado de alguien llamado Bufarreti, y... digamos que tenés que sospechar algo raro. Pero parece que este pibe tiene menos olfato que Voldemort, además carece de todo criterio para discernir que una prueba a la noche es más que raro. Cuando le aclararon los muchachos puesteros que era para el seleccionado gay, dijo que no le importaba. Lo cual me lleva a pensar dos cosas, o es muy tolerante o está muy entregado. Como sea, es su elección, respetable al fin. La junta de notables que había armado la joda lo iba a acompañar, el tal Bufarreti era amigo de uno de ellos, quien se hizo tarjeta falsa y todo. Es más, el "Tucu" llamó al club de futbol donde supuestamente trabajaba "Bufarreti" para ver si existía de verdad. Pero claro, la chica que atendió dudaba y no supo confirmarle o negarle la existencia del solicitado. Es claro que quizá la secretaria era nueva o ve tanta gente que es entendible su vacilación.
Muchos puesteros, le tuvieran cariño o no (algunos lo hacen) le decían o le insinuaban que todo era joda, que le estaban haciendo una broma entre varios. Pero el tipo seguía en sus trece, imperturbable.
-Vos de envidia.-respondía zalamero.
Finalmente, el día de la prueba para los "Dogos" terminó siendo una visita a un cabarute de travestis, donde casi lo sacan a patadas por preguntar por "bufarreti", ya más de dos veces.
Al día siguiente, comentó convencido como había ocurrido todo, pero como si el hipotético Bufarreti fuera el que le había hecho la broma pesada. Dos días tardó en descubrir la cama, ya cuando se había caído de la misma, estaba rodando por el piso enredado en sabanas y cayendo por las escaleras hasta el subsuelo.
Y ahora regresó, para beneplácito o no, el panchero que hace las delicias de gente como la de esta redacción. El panchero que rompe todas las leyes de higiene, moral, buenas costumbres e inteligencia. Y bueno, como dice cierta frase que resulta muy acorde para este hecho: "Las leyes son como las salchichas, mejor no saber como fueron hechas."
QuE Hiiiiiijo de...!
